El envío de remesas al país incide en un mayor grado de inclusión financiera en las personas que las reciben, revela un estudio elaborado por el Centro de Estudios Monetarios Latinoamericanos (CEMLA) y Banorte. Dicho estudio estuvo elaborado con base en una muestra de 9.7 millones de los envíos de remesas a México que Banorte operó en el 2021 y 2022, y que fueron enviados desde Estados Unidos.

“En general, la muestra considerada de envíos de remesas a México en 2021 y 2022, indica un alto grado de inclusión financiera de los receptores de remesas operadas por Banorte”, subraya. Prueba de ello, precisa el documento, es que entre el 2021 y 2022, fue en aumento el porcentaje de remesas que se envió para depósito en cuentas bancarias.

Así, puntualiza, mientras en el primer trimestre del 2021, el porcentaje de las remesas que fueron remitidas para depósito en cuenta fue de 56.8%, para el cuarto trimestre del 2022 ascendió a 72.8 por ciento. “De hecho, en marzo del 2024, dicho porcentaje alcanzó el 84.1%”, destaca.

En este sentido, subraya que el incremento en las remesas recibidas para depósito en cuenta, indica un esfuerzo de Banorte para lograr una mayor inclusión financiera, lo que se ha reflejado en un aumento en el número de cuentas/clientes vinculados. “Del primer trimestre del 2021 al cuarto trimestre del 2022, en la muestra considerada, el número de cuentas que recibieron remesas se incrementó en 46%”, resalta.

En promedio, agrega, cada cuenta recibió en un año 13 remesas, lo que implicó poco más de una al mes.